Pasteles en hojas tradición Petromacorisana.
Amable M. Tejeda un ejemplo de hombre que prospera con la tradición.
El mestizaje culinario se llevo a cabo a raíz de la mezcla de razas y cultura donde no solo cambio el color de la piel, sino también el sistema de alimentarse ,el mestizaje se da en el mismo momento en que pasa los españoles por tierra americana.
La historia de la gastronomía dominicana todavía no se ha escrito. Los párrafos sueltos de sólidos historiadores que han puesto sobre el papel el legado de taínos, africanos y europeos a la dieta criolla es el recurso que se tiene a mano para seguir la pista de la herencia culinaria que los dominicanos han preservado y reinventado de generación en generación, con cocimientos, zumos y asados que tienen una identidad netamente local.
Esto deja a su paso lo que hoy conocemos como” el pastel en hoja”.
Su compleja y trabajosa preparación es un verdadero ritual en algunas familias, que de generación a generación se van pasando el delicado arte de crear la masa hecha de diversos víveres para rellenarla con distintos ingredientes como carne de res, cerdo, pollo o queso. El producto de esa amalgama se envuelve en hojas de plátano, se hierve y entonces resulta la delicia.
Se presume que el origen de la receta, por sus ingredientes, modo de preparación y presentación, tiene fuertes raíces africanas. La hipótesis se demuestra al descubrir que existen variedades con algunas transformaciones en otros países como Puerto Rico, Cuba y países de Centroamérica y el Caribe continental.
Al este del Republica Dominicana, existe un lugar de bellos atardeceres y buenas costumbres donde las culturas se entrelazaron y dejaron a su paso diferentes platos que hoy podemos degustar y que son conocidos como “plato típico “de nuestro país. Cabe destacar que esta provincia recibe el nombre de San Pedro de Macorís provincia fundada el 23 de junio del 1882 por inmigrantes alemanes, árabes, españoles, franceses, italianos y nativos, los cuales tenían costumbres alimenticias distintas.
E de aquí que surge lo que hoy conocemos como el” pastel en hoja de Amable” en San Pedro de Macorís.
Amable Mateo Tejeda junto a su esposa Gisela Paredes empiezan en el 1965 desde su casa un pequeño negocio de pasteles en hojas, creándose un crecimiento en la demanda se vieron obligado a trasladarse el 21 de junio del 1967 a un local mas amplio el cual estaba ubicado en el antiguo mercado frente al banco del reserva de esta provincia. Creciendo su popularidad tanto a nivel local como nacional tuvieron que ampliar su negocio y aumentar su empleomanía dejando atrás el guallo común y haciéndose de maquinarias industriales con lo cual podían sacar adelante una mayor producción de pedido.
Hoy estos están ubicado frente al parque Duarte donde diferentes visitantes nacionales y extranjeros degustan de las diferentes variedades que ellos ofrecen, siendo su ambiente acogedor donde podemos ver obras de arte creación de su hijo mayor, Mateo Tejeda (Pepín) y contar con buenas atenciones donde se escucha frecuentemente y de forma jocosa “un llevar, un comer” frase típica del lugar.
Amable M. Tejeda un ejemplo de hombre que prospera con la tradición.
El mestizaje culinario se llevo a cabo a raíz de la mezcla de razas y cultura donde no solo cambio el color de la piel, sino también el sistema de alimentarse ,el mestizaje se da en el mismo momento en que pasa los españoles por tierra americana.
La historia de la gastronomía dominicana todavía no se ha escrito. Los párrafos sueltos de sólidos historiadores que han puesto sobre el papel el legado de taínos, africanos y europeos a la dieta criolla es el recurso que se tiene a mano para seguir la pista de la herencia culinaria que los dominicanos han preservado y reinventado de generación en generación, con cocimientos, zumos y asados que tienen una identidad netamente local.
Esto deja a su paso lo que hoy conocemos como” el pastel en hoja”.
Su compleja y trabajosa preparación es un verdadero ritual en algunas familias, que de generación a generación se van pasando el delicado arte de crear la masa hecha de diversos víveres para rellenarla con distintos ingredientes como carne de res, cerdo, pollo o queso. El producto de esa amalgama se envuelve en hojas de plátano, se hierve y entonces resulta la delicia.
Se presume que el origen de la receta, por sus ingredientes, modo de preparación y presentación, tiene fuertes raíces africanas. La hipótesis se demuestra al descubrir que existen variedades con algunas transformaciones en otros países como Puerto Rico, Cuba y países de Centroamérica y el Caribe continental.
Al este del Republica Dominicana, existe un lugar de bellos atardeceres y buenas costumbres donde las culturas se entrelazaron y dejaron a su paso diferentes platos que hoy podemos degustar y que son conocidos como “plato típico “de nuestro país. Cabe destacar que esta provincia recibe el nombre de San Pedro de Macorís provincia fundada el 23 de junio del 1882 por inmigrantes alemanes, árabes, españoles, franceses, italianos y nativos, los cuales tenían costumbres alimenticias distintas.
E de aquí que surge lo que hoy conocemos como el” pastel en hoja de Amable” en San Pedro de Macorís.
Amable Mateo Tejeda junto a su esposa Gisela Paredes empiezan en el 1965 desde su casa un pequeño negocio de pasteles en hojas, creándose un crecimiento en la demanda se vieron obligado a trasladarse el 21 de junio del 1967 a un local mas amplio el cual estaba ubicado en el antiguo mercado frente al banco del reserva de esta provincia. Creciendo su popularidad tanto a nivel local como nacional tuvieron que ampliar su negocio y aumentar su empleomanía dejando atrás el guallo común y haciéndose de maquinarias industriales con lo cual podían sacar adelante una mayor producción de pedido.
Hoy estos están ubicado frente al parque Duarte donde diferentes visitantes nacionales y extranjeros degustan de las diferentes variedades que ellos ofrecen, siendo su ambiente acogedor donde podemos ver obras de arte creación de su hijo mayor, Mateo Tejeda (Pepín) y contar con buenas atenciones donde se escucha frecuentemente y de forma jocosa “un llevar, un comer” frase típica del lugar.
1 comentario:
Tengo que admitir con muchísimo gusto que me siento orgullosa pues tenia trece años fuera de mi país y me toco viajar en el mes de julio de 2009 para una boda familiar y los mejores pasteles que he probado los comí en este negocio de San Pedro de Macorís mi ciudad natal ....
Desde siempre me han gustado los pasteles en hojas y he probado sabrosos en muchos lugares pero el numero uno y el mejor se come en Amable... Definitivamente los recomiendo.
Gracias por permitirme disfrutar tan sabrosa receta, se ve que los hacen con amor.
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